La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es una enfermedad crónica que incluye dos formas fundamentales: la enfermedad de Crohn (EC) y la colitis ulcerosa (CU), las cuales cursan por períodos de exacerbación (crisis) y remisión. A menudo se diagnostican en adultos jóvenes e incluso niños, permaneciendo durante toda la vida del paciente.
TIPOS DE EII
- Colitis Ulserosa
Enfermedad crónica que afecta exclusivamente al colon (intestino grueso); comenzando habitualmente en el recto y extendiéndose de manera continua y simétrica a otros segmentos del colon (colon ascendente, colon transverso y colon descendente).
- Enfermedad de Crohn
Enfermedad crónica que puede afectar a cualquier tramo del tracto digestivo, desde la boca hasta el ano, siendo más frecuente su presencia en la región íleo-cecal: íleon terminal (parte final del intestino delgado) y ciego (parte inicial del colon).
Signos y síntomas
Entre los signos y síntomas frecuentes de la enfermedad de Crohn y de la colitis ulcerosa se incluyen los siguientes:
- Diarrea
- Fatiga
- Dolor abdominal
- Presencia de sangre en las deposiciones
- Disminución del apetito
- Pérdida de peso involuntaria
- Síntomas perianales: fístulas, abscesos, en pacientes con enfermedad de Crohn
- Retraso en crecimiento y maduración sexual en los niños
- Manifestaciones extraintestinales: pueden observarse síntomas o complicaciones en otros órganos del cuerpo. Entre las más comunes, están la presencia de lesiones dermatológicas, oculares, articulares, vasculares y hepáticas.
CAUSAS
La etiología de la enfermedad es desconocida y la patogénesis aún no ha sido completamente aclarada. Sin embargo, existe evidencia que ésta se desarrolla por una respuesta inmune descontrolada hacia la microbioma intestinal u otros factores ambientales, en individuos genéticamente susceptibles.
DIAGNÓSTICO
Exámenes de sangre: permiten evaluar parámetros de procesos de inflamación, anemia y/o presencia de infecciones.
- Exámenes de deposiciones:
- Calprotectina fecal.
- Descartar infección por Clostridioides difficile u otro microorganismo.
- Endoscopía: examen que permite la visualización del esófago, estómago y la parte más próxima al intestino delgado (duodeno).
- Colonoscopía con biopsias: examen que permite observar el interior del recto, colon e íleon terminal, y obtener muestras de tejido de cualquier lesión para su posterior estudio anatomopatológico (biopsias).
- Resonancia o TC con enteroclisis: exámenes radiológicos que son de gran ayuda para diagnosticar complicaciones (estenosis, fístulas), además de determinar extensión de la enfermedad.
- Cápsula endoscópica: dispositivo que se ingiere y permite tomar imágenes de todo el tubo digestivo durante su recorrido, su objetivo es el estudio completo del intestino delgado.
- Ecografía abdominal: examen que permite ubicar el proceso inflamatorio y descartar otras enfermedades con síntomas similares, como por ejemplo apendicitis.
TRATAMIENTO:
El tratamiento de la EII es complejo y varia de un paciente a otro por lo que requiere un enfoque personalizado.
El objetivo del tratamiento es controlar los síntomas de la enfermedad, lograr la remisión clínica, con biomarcadores como calprotectina fecal, endoscópico e histológica y de esta forma restaurar la calidad de vida de los pacientes.
Tipos de tratamiento:
- Salicilatos
Este tipo de fármacos son considerados como un antiinflamatorio de acción local sobre el colon. Se pueden administrar por vía oral y tópica (supositorios, enemas o espumas de mesalazina), dependiendo de la extensión y gravedad de la enfermedad. En este grupo encontramos la mesalazina y sulfasalazina.
- Corticoides
Fármacos con efecto antiinflamatorio e inmunosupresor. Se utilizan solo en brotes moderados y graves de la enfermedad, debido a los efectos adversos que pueden presentar. Siempre deben ir acompañados de calcio. La budesonida aunque es menos efectiva que la prednisona, presenta menos eventos adversos siendo una opción en paciente con un brote leve.
- Inmunomoduladores
Son fármacos que modulan la respuesta exagerada del sistema inmunitario y disminuyen la inflamación. En este grupo encontramos la azatioprina, mercaptopurina y metotrexato.
- Terapia biológica
Generalmente este tipo de medicamentos se utiliza cuando el resto de los tratamientos han fracasado, aunque en caso de pacientes que presenten una enfermedad grave, se pueden utilizar como tratamiento de primera línea.
- Moléculas pequeñas
Son fármacos que actúan a nivel intracelular siendo una opción en pacientes que han fracasado a la terapia biológica.
- Cirugía
la cirugía está indicada cuando fracasa el tratamiento médico. El tipo de procedimiento dependerá de la clasificación, extensión y complicaciones de la EII.